Reducir la percepción de inseguridad a través del diseño

¿Cómo se pueden diseñar infraestructuras de seguridad para proteger espacios públicos, especialmente aquellos de interés turístico, sin que esto dañe el paisaje urbano? Esta fue una de las preguntas que intentaron responder los miembros del proyecto PACTESUR en un taller en línea organizado por Efus, que se celebró el pasado 10 y 12 de marzo. El objetivo de este encuentro era discutir y elaborar, junto al Comité Asesor de Expertos y el Grupo de Ciudades Asociadas a la red, una serie de recomendaciones para mejorar la planificación e implementación de medidas de seguridad física que reduzcan la percepción de inseguridad de la población. En FEPSU te compartimos algunas de sus conclusiones. 

Diseñar la seguridad

Los espacios públicos son áreas vitales para la vida urbana, ya que en ellos se lleva a cabo la socialización y el encuentro de las personas, pero también son lugares donde ocurren manifestaciones políticas o representaciones artísticas y culturales de todo tipo. Sin embargo, también pueden estar sujetos a una serie de amenazas, como el terrorismo, la presencia de grandes multitudes o los movimientos abruptos generados por el pánico, así como a riesgos climáticos, como incendios o inundaciones. 

Garantizar que los espacios públicos sean seguros y a la vez inclusivos y abiertos es un desafío complejo para las ciudades. Por esto mismo, es importante abordar la seguridad de estas áreas urbanas desde el principio, desde el momento de la planificación y el diseño, un abordaje conocido como “seguridad a través del diseño”, en el cual no solo intervienen la arquitectura y el mobiliario urbano, sino también el análisis de los flujos y las infraestructuras críticas y los métodos y las tecnologías de detección de posibles amenazas. 

Los espacios públicos constituyen un ámbito específico de la seguridad urbana: requieren una política de seguridad que se base en la cooperación entre las diferentes organizaciones e instituciones interesadas (autoridades locales, policía, servicios de emergencia, arquitectos y urbanistas, representantes de los usuarios, etc.). Solamente a través de una auténtica cooperación en la producción de seguridad se podrá garantizar que los espacios públicos sigan siendo seguros, abiertos y accesibles para todos.

Soluciones locales

Desde esta perspectiva, las autoridades locales son las mejor posicionadas para aplicar un modelo de seguridad a través del diseño, ya que son quienes comprenden mejor las preocupaciones de los ciudadanos en relación a la seguridad y la accesibilidad de los espacios públicos, así como son quienes pueden implementar las medidas adecuadas para reducir la percepción de inseguridad generada por los riesgos y las amenazas. 

En Lieja (Bélgica), por ejemplo, se está instalando una barrera móvil para vehículos para proteger la Place Saint Lambert y Le Carré. En Turín (Italia), en cambio, se instalará un sistema de alta tecnología de control de multitudes en la Piazza Vittorio Veneto, con el objetivo de evitar movimientos abruptos provocados ​​por el pánico, como el que ocurrió en junio de 2017 durante la proyección al aire libre de la final de la Liga de Campeones. Finalmente, en Niza (Francia), se ha desarrollado un dispositivo antiintrusión reforzado para proteger la Promenade des Anglais, en particular para evitar ataques terroristas como el del 14 de julio de 2016 con un camión.  

En estos proyectos se presta especial atención a su integración en el paisaje urbano, el patrimonio natural y cultural, la estética, el diseño y la movilidad urbana para evitar la “bunkerización” de las ciudades. Estos dispositivos de seguridad también reflejan los diferentes enfoques de estas tres ciudades a la hora de asegurar los espacios públicos urbanos. También deben verse como herramientas adicionales que contribuyen a la seguridad en los espacios públicos, pero de ninguna manera son una solución per se

Evaluación y recomendaciones

Después de haber implementado estos proyectos piloto, las ciudades miembro del proyecto PACTESUR se reunieron con el Comité Asesor de Expertos y el Grupo de Ciudades Asociadas de Efus para evaluar las estrategias llevadas a cabo. Para ello, se tuvo en cuenta no solo los aspectos relacionados con la seguridad, sino también su integración en el paisaje urbano, su resiliencia y sostenibilidad, así como su aceptación entre la población. Esta fue una evaluación preliminar de los proyectos, realizada a través de un cuestionario, la cual se completará con la visita in situ de los dispositivos instalados en las tres ciudades.

A partir de estas primeras evaluaciones, se redactó una serie de recomendaciones dirigidas a las autoridades locales para mejorar la planificación, implementación y gestión de dispositivos de seguridad para proteger los espacios públicos en Europa. En ellas se destacó la importancia de adoptar un enfoque de seguridad global e integrado, donde la implementación de un equipo se concibe como una pieza complementaria que forma parte de una seguridad más amplia para proteger los espacios públicos.

Además, para promover un enfoque preventivo y desarrollar soluciones a medida, las autoridades locales deben realizar evaluaciones periódicas de riesgo y vulnerabilidad. Este enfoque no solo permitirá a las autoridades locales obtener una mejor comprensión de las vulnerabilidades, sino también no caer en agendas cortoplacistas y de urgencia. El carácter en constante evolución de las amenazas y riesgos inherentes a los espacios públicos requiere de evaluaciones periódicas.

Favorecer la participación

Finalmente, en el taller se mencionó también la importancia de favorecer la inclusión de los ciudadanos en el proceso de toma de decisiones, especialmente para aquellas actuaciones que tengan un impacto en el atractivo y la apertura de los espacios públicos locales. 

Esto debe hacerse de acuerdo con criterios de representatividad y bajo la guía de las autoridades locales. Además, se debe fomentar la apropiación de estos espacios por parte de la ciudadanía y la sociedad civil, por ejemplo a través de soluciones creativas o que agreguen valor artístico a las instalaciones de seguridad con el objetivo de integrarlos mejor en el paisaje urbano. 

Todo esto exige un mayor esfuerzo también en las acciones de comunicación y sensibilización de la población antes, durante y después de la implementación de infraestructuras de seguridad física, ya que es la manera más eficiente de ayudar a aumentar la aceptación pública y disminuir la percepción de inseguridad entre los ciudadanos.

Si quieres conocer a fondo las conclusiones de este taller organizado por Efus junto a las ciudades participantes del proyecto PACTESUR, puedes visitar la página web de la red europea. Para informarte sobre otros temas y proyectos relacionados con la seguridad urbana y la prevención, no dudes en visitar la página web de FEPSU

A la espera de una ley sobre reconocimiento facial

Unas decenas de académicos, profesionales y activistas de varios ámbitos han pedido al Gobierno español que hasta que no exista una ley que regule las herramientas de reconocimiento facial, no sean utilizadas en el Estado español. La petición llega en un momento en el que ya se está utilizando este tipo de técnicas, tanto en espacios públicos como en entornos privados. En el blog Notes de seguretat de la Generalitat de Catalunya han explicado los argumentos de esta solicitud que pide frenar el uso de la tecnología de reconocimiento facial en España hasta que no exista una regulación específica. En FEPSU te compartimos los puntos clave de esta petición.

Una normativa con garantías

Los firmantes de la petición solicitan una moratoria en el uso y comercialización de sistemas de reconocimiento y análisis facial por parte de empresas públicas y privadas y que las instituciones legislativas europeas debatan qué herramientas y de qué manera, en qué condiciones, con qué garantías y con qué objetivos se tiene que permitir, si cabe, el uso de estos sistemas.

Para los demandantes es preciso que el Gobierno se plantee regular esta tecnología antes de que siga expandiéndose y se convierta en un elemento utilizado y extendido. Es decir, si el reconocimiento facial no se adapta a una ley concreta que asegure el respeto a los derechos de los ciudadanos, temen que sea la ley la que deba adaptarse a las prácticas ya existentes.

Los firmantes se refieren al hecho de que esta tecnología supone una intromisión en la esfera privada de la vida de las personas sin su consentimiento explícito y pone en entredicho cuestiones fundamentales de justicia social, dignidad humana, equidad, igualdad en el trato e inclusión.

Evitar los estereotipos

El uso de programas de análisis facial puede derivar en problemas en el ámbito de los derechos civiles. En concreto, explican que asimilar una persona a un colectivo basándose en sus rasgos o datos biométricos es altamente problemático ya que se perpetúa el estereotipo, en cualquier ámbito. Por ejemplo, que esta persona pueda ser peligrosa o morosa porque otras semejantes a ella lo son es una premisa injusta.

Existen evidencias suficientes que indican que asociar posturas, gestos, rasgos faciales, colores de piel, peinados o prendas a posibles comportamientos problemáticos, capacidades intelectuales o económicas puede resultar en clasificaciones racistas, clasistas o sexistas.

El reconocimiento facial, además, ha comportado en varias ocasiones falsos positivos y falsos negativos, porque depende en gran medida de cómo se entrene la inteligencia artificial y con qué tipo de imágenes. Si se educa con muchas fotografías de hombres blancos o con condiciones de luz específicas, por mencionar dos ejemplos, el análisis facial tenderá a ser menos preciso para las personas negras o con condiciones lumínicas distintas.

Así pues, existe una variada gama de razones –tanto técnicas como éticas– que justifican la creación de una comisión para investigar la necesidad de una moratoria, que se considera imprescindible y urgente. Para concluir, se sugiere que esta comisión sea independiente y esté compuesta por científicos, juristas, expertos en ética e inteligencia artificial y miembros de la sociedad civil, especialmente de aquellos colectivos que pueden verse afectados por estos sistemas.

Si quieres conocer más información sobre la petición de estos expertos y activistas, puedes visitar el blog Notes de seguretat de la Generalitat de Catalunya. Para saber más sobre este y otros temas relacionados con la seguridad urbana y la prevención, no dudes en pasarte por la página web de FEPSU.

¿Cómo diseñar calles más seguras para las mujeres?

El secuestro y asesinato de la joven londinense Sarah Everard ha reabierto el debate sobre la seguridad de las mujeres en las calles del Reino Unido. En respuesta, el Gobierno británico aprobó una inversión de 45 millones de libras esterlinas para mejorar la iluminación pública e instalar más cámaras de seguridad, así como un plan piloto para colocar a policías vestidos de paisano en pubs y clubes. Sin embargo, estas medidas han sido criticadas por expertos en seguridad y diseño urbano, ya que consideran que no aborda el problema estructural de inseguridad que viven las mujeres en las calles. La reportera especializada en diseño y arquitectura, Anne Quito, ha conversado sobre este tema en la revista Quartz con varios expertos en prevención y diseño urbano. En FEPSU te compartimos algunas de sus conclusiones. 

Más ojos, menos delitos

La urbanista norteamericana Jane Jacobs escribía en 1961 en su libro Muerte y vida de las grandes ciudades que la “paz pública” no la mantiene principalmente la policía, a pesar que su trabajo sea muy necesario. “Los horribles crímenes públicos pueden ocurrir, y ocurren, en estaciones de metro bien iluminadas cuando no hay ojos eficaces”, apuntaba Jacobs, que señalaba también que una calle concurrida es la mejor forma de seguridad

Bajo esta lógica, las expertas británicas en seguridad y diseño urbano han criticado que invertir en alumbrado público y colocar policía de paisano es solo una medida estética para hacer frente a las recientes críticas. La directora ejecutiva del Consejo de Diseño británico, Sue Morgan, ha asegurado que lo que habría que hacer es invertir en estructuras urbanas que sean inclusivas, que permitan crear espacios en los que la gente pueda pasar tiempo y quedarse, ya que “cuanta más gente haya en un lugar, más seguro se volverá”. 

El director de la junta de la asociación de Prevención Internacional del Crimen mediante el Diseño Ambiental, Paul Van Soomeren, ha subrayado que una forma de conseguir esto es cerrar algunas calles por la noche y redirigir a los peatones a una o dos arterias. De esta manera se podría conseguir que el alumbrado público sea efectivo, ya que no solo funcionaría para iluminar los caminos, sino que permitiría a los vecinos y a los comerciantes observar su entorno con claridad y actuar de forma rápida ante cualquier actividad delictiva que observen. 

Mejores calles y civismo

Además de promover la presencia constante de personas en la calle, otro de los aspectos que puede ayudar a generar una mayor sensación de seguridad para las mujeres es el buen mantenimiento y conservación de las calles. Van Soomeren ha destacado que un estudio publicado en 2008 en los Países Bajos demostró que en aquellas calles donde había grafitis, escombros y ventanas rotas, aumentaron los robos y los comportamientos antisociales.

Pero el mantenimiento de las calles va más allá mantener las calles limpias, arreglar las farolas rotas o podar los arbustos para que no oscurezcan las líneas de visión. Otro de los aspectos a tratar, por ejemplo, es la corrección de hábitos sociales problemáticos en la denuncia de delitos. Por ejemplo, en Estados Unidos, la psicóloga social de la Universidad de Stanford, Jennifer Eberhardt, demostró cómo cambiando el lema de seguridad «si ve algo, diga algo» por el eslogan «si ve algo sospechoso, diga algo específico», los incidentes de perfiles raciales se redujeron hata en un 75% en unos pocos meses.

Más allá de los cambios físicos en el diseño de las ciudades, un factor clave para mejorar la seguridad de los ciudadanos y las ciudadanas es convencer a las personas para que actúen como custodios de su entorno inmediato. “Uno de los grandes errores es pensar que la seguridad es algo exclusivo de la policía”, ha manifestado Van Soomeren. El objetivo debería ser concienciar a las personas que deben tener responsabilidad de sus vecinos y de la gente que pasa por las calles de su vecindario. 

Falta de diversidad

El problema de inseguridad de las mujeres en las calles tiene una raíz estructural. La falta de diversidad en el diseño es una parte fundamental de este problema, ya que, como ha destacado Morgan, en el Reino Unido el 78% de la fuerza laboral en el ámbito del diseño son hombres. En este sentido, se hace necesaria la inclusión de más mujeres en el diseño de las ciudades para permitir una planificación urbana con perspectiva de género

En décadas anteriores ha habido esfuerzos muy diversos por potenciar el rol de las mujeres en la planificación y el diseño de las ciudades. Más allá de Jane Jacobs, en la década de 1980 se desarrollaron algunas iniciativas interesantes en este sentido, como el Women’s Design Service en el Reino Unido. Se trataba de una coalición de planificadoras urbanas, arquitectas y diseñadoras feministas británicas que se unieron para investigar y exigir un entorno urbano más seguro e inclusivo para las mujeres. Entre sus reivindicaciones se encontraba la mejora de los baños públicos y la creación de parques y calles más seguras. Sin embargo, a pesar que desarrollaron publicaciones relevantes en el ámbito del diseño urbano, el Women’s Design Service abandonó sus actividades por falta de financiación. 

En otros países europeos se han desarrollado iniciativas similares, en las cuales han sido mujeres las que han liderado las investigaciones sobre cómo hacer calles más seguras, por ejemplo en el centro Vrouwen Bouwen Wonen de los Países Bajos o el Frauenbüro en Austria, así como el trabajo de las académicas canadienses Gerda Wekerle y Caroline Witzman, entre otras. La inclusión de las mujeres en el diseño de las ciudades es un paso necesario para crear calles más seguras. 

Si quieres conocer más estrategias de diseño urbano para mejorar la seguridad de las mujeres, puedes consultar el artículo completo publicado en la revista Quartz. Si deseas informarte sobre otros temas relacionados con la seguridad urbana y la prevención, no dudes en consultar la página web de FEPSU.

Una guía para una prevención integral del delito

Abordar la seguridad urbana de forma integral, tomando en cuenta los distintos factores que entran en juego para su mantenimiento, no es una tarea fácil. Aún así, este ha sido el objetivo que se han marcado los investigadores del Instituto Vasco de Criminología y doctores en Psicología César San Juan y Laura Vozmediano, que acaban de publicar la Guía de prevención del delito. Seguridad, diseño urbano, participación ciudadana y acción policial (2021, J.M. Bosch Editor). Este libro es un compendio estructurado y exhaustivo de acciones y estrategias de diagnóstico e intervención orientadas al fomento de la seguridad, dirigido a todo tipo de profesionales de la seguridad urbana, desde policías y criminólogos, hasta técnicos locales. En FEPSU te presentamos alguna de las claves de este manual.

La seguridad como un proceso

El punto de partida de los doctores San Juan y Vozmediano en la elaboración de esta guía ha sido que la seguridad no se trata solo de la reducción o la ausencia de todo tipo de actividad delictiva. La seguridad urbana debe ser entendida de forma integral, como un proceso de mejora continua de la calidad de vida de la ciudadanía. 

Por eso mismo, es muy importante que en ese proceso intervengan todos los actores sociales que puedan verse afectados, desde el ámbito más local, hasta el regional y nacional. Además, es de vital importancia recurrir a nuevos modelos de acción policial para que las medidas de prevención del delito puedan ser realmente exitosas. 

Ahora en el siglo XXI uno de los principales retos para las ciudades en materia de seguridad es la convivencia en sociedades multiculturales complejas. En este sentido, uno de los puntos que debe abordar una prevención integral del delito debe ser, sin duda, el favorecer un clima de seguridad y libertad, al mismo tiempo que se trabaja por reducir la sensación de miedo de la ciudadanía, sobre todo en las grandes ciudades, ya que este es uno de los factores que más contribuyen al deterioro de la convivencia. 

La importancia del diseño urbano

¿Qué otros factores intervienen en la consecución de una seguridad urbana integral? Para los autores de la Guía de prevención del delito, uno de los aspectos claves a tener en cuenta es el diseño de las ciudades. La planificación urbana no solo debe ser una herramienta clave a la hora de prevenir la actividad delictiva, sino que es también un factor muy importante para garantizar unas ciudades inclusivas, seguras y amigables, donde la convivencia pueda ser posible. 

En el prólogo del libro, el Dr. Marcus Felson, profesor de Justicia Criminal de la Texas State University, señala que el diseño y también el mantenimiento de los barrios es uno de los factores que intervienen en el incremento o en la reducción del delito. “Es demasiado habitual en las sociedades contemporáneas diseñar los barrios sin unas expectativas claras de las dinámicas sociales que se pretenden incentivar”, apunta Felson, un hecho que provoca que el delito se establezca en aquellos barrios donde hay una escasez de servicios públicos o donde la gestión del espacio urbano ha sido inexistente o insuficiente. 

Es por este motivo que es muy importante tener en cuenta el diseño y la planificación urbana desde el primer momento para garantizar un clima de seguridad en las ciudades. Si esto no es así, los problemas de seguridad podrían acabar siendo relegados únicamente a la policía o a la seguridad privada, sin que las administraciones públicas asuman las responsabilidades que le pertocan a la hora de mantener unos barrios seguros. 

Voces experimentadas 

Ya que la prevención del delito es una materia que toca diversas aristas, es necesaria una implicación de múltiples actores y agencias en el mantenimiento de la seguridad. Por eso, esta Guía de prevención del delito aborda los retos para las ciudades en materia de seguridad desde una óptica de la prevención situacional del delito y la prevención del delito a través del diseño ambiental, conocida como CPTED por sus siglas en inglés. 

En este sentido, la experiencia de los autores del libro es vital para el desarrollo de las herramientas y propuestas que realizan en la publicación. Ambos son profesores en el ámbito de las ciencias criminológicas para el departamento de Psicología Social de la Universidad del País Vasco y forman parte de uno de los grupos de investigación de máxima categoría del sistema universitario vasco. 

El doctor San Juan es el director de este grupo de investigación, el cual ha desarrollado diversos trabajos de consultoría en materia de seguridad para administraciones locales, así como una amplia producción científica en revistas, capítulos del libro y monografías. 

Además, la doctora Vozmediano obtuvo el I Premio a la Promoción de Investigadores Noveles en Criminología otorgado por la Sociedad Española de Investigación Criminológica y obtuvo el Premio Pinatel al mejor trabajo de investigación en Criminología en su cuarta edición. En la actualidad, ambos forman parte del equipo de dirección de la publicación International e-Journal of Criminal Science.

Si quieres conocer más sobre la Guía de prevención del delito y adquirir algún ejemplar, puedes visitar la web de la Librería Bosch. Para informarte sobre otros temas e iniciativas relacionados con la seguridad urbana y la prevención, te invitamos a visitar la página web de FEPSU, donde además encontrarás recursos y proyectos.

Drones para proteger las ciudades: beneficios y desafíos

En los últimos años, el uso de drones por parte de las administraciones públicas y cuerpos de policía ha aumentado significativamente en las ciudades europeas. Estos sistemas pueden realizar funciones efectivas de seguimiento y vigilancia en espacios públicos. Sin embargo, aún se necesita avanzar en la investigación para identificar la mejor manera de obtener resultados óptimos, ya que el uso de esta tecnología genera preocupaciones sobre el derecho a la privacidad y la protección de datos. Como parte del proyecto PACTESUR, Efus ha preguntado a las ciudades de Turín y Edimburgo cuáles han sido los principales beneficios y desafíos de emplear drones para proteger las ciudades. En FEPSU te compartimos algunas de sus principales conclusiones. 

Beneficios para las zonas urbanas

No hay duda de que los drones (o sistemas de aeronaves no tripuladas) son herramientas muy versátiles a la hora de proteger el espacio público. Se pueden utilizar para prevenir posibles ataques físicos a infraestructuras críticas de las zonas urbanas (energía, agua, sistemas de vida), aeropuertos, eventos al aire libre y conciertos. Por este motivo, algunas ciudades europeas han establecido Unidades de Drones dentro de su policía municipal para desarrollar, implementar y mejorar su uso en los espacios públicos.

Ese es el caso de la Policía Local de Turín, quienes principalmente han incorporado estas herramientas debido a la oportunidad de utilizar sensores diurnos y nocturnos en tiempo real, los cuales son capaces de detectar la presencia de personas en ciertas áreas urbanas donde podrían estar en riesgo; por ejemplo, en los parques durante la noche o para monitorear las rutas de entrada y salida de eventos multitudinarios, como ha asegurado el Comisario Jefe del Departamento de Investigaciones Tecnológicas (RIT), Gianfranco Todesco. 

En Edimburgo, en cambio, han separado los usos que hacen de los drones en materia de seguridad en dos unidades distintas, por un lado la Unidad de Sistemas de Aeronaves Piloto a Distancia de la Policía (RPAS) y por el otro la Unidad de Seguridad y Protección de la Aviación (ASSU). La primera, utiliza las aeronaves no tripuladas como una forma rápida y eficaz de monitorear áreas grandes o a veces inaccesibles que, de otro modo, requerirían mucho tiempo y recursos a un equipo de búsqueda sobre el terreno, como ha señalado el Jefe de la ASSU, el Inspector Graeme Rankin. La ASSU, en cambio, emplea una variedad de técnicas para proteger a la ciudadanía de posibles amenazas aéreas o para combatir el uso ilegal de drones y asistir a aquellos usuarios que cuenten con permiso de vuelo. 

Principales desafíos

El uso de drones por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad sigue siendo fenómeno aún novedoso en las ciudades europeas y presenta todavía algunos desafíos. Para el Inspector Rankin, uno de los principales inconvenientes es que mantenerse al día con la evolución de la tecnología es difícil y supone una inversión importante para las policías, sobre todo las locales. Además, la estricta regulación de la aviación en Europa crea unas condiciones de operación muy desafiantes para las fuerzas y cuerpos de seguridad, aunque eso, más que un reto, puede ayudar a mantener niveles altos de estándares de seguridad.

Para el Comisario Todesco, en cambio, el principal desafío en el uso de drones en materia de seguridad y prevención es la falta de “vías aéreas urbanas” para garantizar el desarrollo de servicios tanto para las autoridades públicas como para las empresas privadas. Las “vías aéreas urbanas” son carriles aéreos o corredores de vuelo dedicados para operaciones con drones que garantizan la máxima seguridad con una mínima interrupción para los ciudadanos, aunque están aún poco implementados en la mayoría de ciudades europeas.

Consecuencias para la privacidad

Otro de los grandes desafíos a los que se enfrentan las administraciones públicas a la hora de favorecer el uso de drones en materia de seguridad y prevención es el mantenimiento de la privacidad y la protección de datos. Según el Comisario Todesco, el uso de drones no difiere del que se hace a través de la videovigilancia pública y, por lo tanto, podría aplicarse la misma legislación. Sin embargo, sí es cierto que deben tenerse en cuenta criterios éticos para un buen uso de algoritmos de inteligencia artificial a bordo de drones equipados con cámaras. 

En el caso de Escocia, por ejemplo, todas las operaciones realizadas con drones por la policía se llevan a cabo de acuerdo con una Evaluación de impacto de protección de datos, el Reglamento general de protección de datos y una Evaluación de impacto de igualdad y derechos humanos. El Inspector Rankin ha subrayado que la participación de la comunidad es fundamental, ya que genera confianza, tranquilidad y seguridad, por lo que toda actividad con drones policiales debe ser transparente y su despliegue debe tener un propósito policial legítimo, seguro, legal, proporcionado y necesario. 

Retos para la normativa 

La normativa europea sobre drones debe ser el principal marco regulador que permita no solo un buen uso de los dispositivos y de los datos recopilados por parte de las administraciones públicas, sino que también posibilite una mayor confianza pública en el uso de esta tecnología para prevenir las amenazas a la seguridad en las ciudades

Para el Comisario Todesco, el principal reto es adaptar constantemente la normativa europea a la rápida evolución de la tecnología que utilizan los drones. Sin embargo, como ha destacado el Inspector Rankin, los cambios en la legislación europea que entraron en vigor este 2021 presentan algunas oportunidades interesantes para que los operadores de aeronaves no tripuladas y los pilotos vuelen en circunstancias que antes no eran posibles. 

El reto ahora para las ciudades europeas es invertir rápidamente en tecnología que garantice que el espacio aéreo inferior esté libre de conflictos y que el público en general y aviador se mantenga a salvo de aquellos que pueden usar aeronaves no tripuladas de manera imprudente o con un propósito criminal deliberado, como bien ha apuntado el Inspector Rankin. 

Si quieres conocer más respecto a los desafíos y beneficios del uso de drones en materia de seguridad urbana y prevención, puedes consultar este artículo en el que se exponen las conclusiones de la primera sesión del ciclo de encuentros virtuales participativos sobre “Nuevas tecnologías aplicadas a la seguridad urbana”, organizado por FEPSU.

Tecnología y privacidad en tiempos de Covid

La tecnología ha jugado un papel importante en la respuesta a la pandemia de la Covid-19 en todo el mundo. Sobre todo ha predominado el uso de aplicaciones de rastreos de contactos, que brindan beneficios indiscutibles como la precisión, la velocidad y la capacidad de gestionar grandes cantidades de información. Sin embargo, también plantean dudas respecto al respeto de la privacidad y el uso de los datos por parte de estas herramientas y de quienes las manejan. Alrededor de estas cuestiones se debatió el pasado 11 de febrero en el simposio en línea “Los datos y el orden público: de las prácticas descriptivas a las prescriptivas”, organizado por la Universidad de Groningen (Países Bajos) y en el que Efus participó. En FEPSU te compartimos algunas de las principales conclusiones a las que se llegaron en este evento.

Avances tecnológicos en pandemia

Durante el evento, Efus fue la organización encargada de moderar el panel sobre las oportunidades y riesgos del uso de datos por parte de las instituciones públicas, una sesión titulada “Gestión de crisis y protección de datos durante Covid-19”. En ella se profundizó alrededor de muchos de los puntos tratados en las conferencias web organizadas el año pasado por la red sobre la gestión de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus

En mayo de 2020, los países europeos apenas habían empezado a desarrollar y probar aplicaciones de rastreo de contactos, y algunos estaban usando drones para monitorear las regulaciones de distancia física. En esos meses, Efus organizó una conferencia web sobre el uso de tecnología para gestionar la pandemia, donde ya se ahondó respecto al impacto que estas podían tener en la privacidad de las personas. 

A finales de 2020, FEPSU también realizó una serie de conferencias web con actores locales y regionales españoles en materia de seguridad urbana, para discutir los retos y beneficios del uso de drones, así como los criterios éticos para un buen uso de la inteligencia artificial por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad. Sin embargo, desde entonces se ha podido constatar una evolución de la tecnología, sobre todo en lo que respecta a la garantía de la protección de datos y las formas en que la percepción pública respecto a ellas ha cambiado. 

La tecnología y su contexto 

En el simposio se analizaron distintos casos del uso de la tecnología para la gestión de la pandemia. La Dra. Angela Daly del Centro Strathclyde de Derecho y Políticas de Internet en Glasgow (Reino Unido) explicó que la aplicación escocesa de rastreo de contactos recibió una aceptación relativamente alta por parte de la población, lo cual ha sido clave para su efectividad. Daly destacó que lograr una alta aceptación entre la ciudadanía solo es posible si existe confianza en el gobierno y sus capacidades de gestión de datos.

Por otro lado, Anis Fuad del Centro para la Sociedad Digital de la Universidad Gadjah Mada en Yogyakarta (Indonesia) comentó que Indonesia había sido testigo de un aumento de la telemedicina debido al nuevo coronavirus. Fuag aseguró que muchas empresas de telemedicina están ampliando sus servicios, lo que plantea la pregunta de cómo continuarán estas iniciativas una vez superada la crisis de la Covid-19 y, específicamente, qué pasará con los datos que se recopilen a través de dichas aplicaciones.

Principios de protección de datos

El Consejo de Europa ha elaborado un informe sobre soluciones digitales para luchar contra la Covid-19, en el cual se describe cómo las medidas de emergencia afectaron los derechos a la privacidad y la protección de datos. El documento fue presentado por la Jefa de la Unidad de Protección de Datos del Consejo de Europa, Sophie Kwasny, quien es la responsable del establecimiento de estándares y políticas sobre protección de datos y privacidad. 

Kwasny destacó que los principios de protección de datos que se aplican en un estado de emergencia son: el escrutinio efectivo (parlamentario y judicial), la previsibilidad de la legislación de emergencia y la cooperación leal entre las instituciones estatales. El principio del escrutinio efectivo, por ejemplo, nos obliga a plantearnos las siguientes interrogantes: ¿Han sido efectivas las tecnologías utilizadas hasta ahora (aplicaciones de rastreo de contactos, monitoreo de drones, brazaletes electrónicos, por nombrar solo algunas)? En otras palabras, ¿vale la pena correr el riesgo de filtraciones de datos por la promesa de la tecnología?

Uso responsable de los datos

¿Cómo podemos empezar a pensar en un uso responsable de los datos ante una crisis como la actual pandemia? El decano del Campus de la Facultad de Fryslan de la Universidad de Groningen, Andrej Zwitter, reiteró que existen medios para garantizar el uso seguro de los datos durante situaciones de crisis.

Más allá de las salvaguardas enumeradas por Sophie Kwasny, el decano Zwitter también señaló que la comunidad humanitaria ha desarrollado principios como el procesamiento justo de datos y los derechos a la retención y eliminación de datos. No obstante, quedan por abordar una serie de lagunas, como los derechos de los interesados ​​y la necesidad de elaborar un concepto que incluya la privacidad del grupo, en lugar de abordar únicamente los derechos de privacidad individuales.

Si te interesa conocer más sobre los debates actuales entorno al uso de la tecnología en el ámbito de la seguridad y la prevención, no dudes en visitar la página web de FEPSU, donde además encontrarás también diversos recursos sobre la materia e información sobre los proyectos en los que participan los miembros de la red.

Herramientas para reducir el impacto de los delitos leves

Desarrollar herramientas de apoyo y recursos de orientación para reducir el impacto de los delitos leves es el principal objetivo del proyecto Cutting Crime Impact (CCI). Esta iniciativa, liderada por la Universidad de Salford y de la que Efus es socio, se inició en 2018 y finaliza este 2021 su fase de desarrollo. A finales de enero, el consejo asesor del proyecto realizó una evaluación preliminar de los conjuntos de herramientas que han desarrollado, los cuales se pondrán a disposición de los responsables políticos y las fuerzas y cuerpos de seguridad del Reino Unido, Estonia, Alemania, Países Bajos, Portugal y España En FEPSU te compartimos algunas de las principales conclusiones sobre el uso y el diseño de estos materiales.

Diseño colectivo y finalidad práctica

En el proyecto CCI han participado no solo autoridades locales y regionales, sino también miembros de las fuerzas policiales nacionales, locales y regionales, quienes han colaborado juntos en el desarrollo de los recursos y materiales de apoyo. 

En total se ha creado un prototipo de ocho conjuntos de herramientas, es decir, dos para cada una de las cuatro áreas de enfoque del proyecto: vigilancia policial predictiva, vigilancia comunitaria, prevención del delito mediante el diseño y la planificación urbana, y la medición y mitigación de la percepción de inseguridad de los ciudadanos. 

Estos toolkits incluyen herramientas para mejorar los sistemas de conocimiento internos de las fuerzas y cuerpos de seguridad, así como para fomentar la colaboración multidisciplinaria con socios locales y mejorar la evaluación del impacto de los delitos leves

Un aspecto importante en el desarrollo de estas herramientas ha sido el papel clave que han tenido los usuarios finales de estos conjuntos de herramientas, que son las instituciones policiales de todos los niveles y, más concretamente, los y las agentes de las fuerzas y cuerpos de seguridad. 

Para ello, los socios han realizado una investigación exhaustiva sobre sus necesidades y dificultades reales, con el fin de producir soluciones a medida. Esto también significa que, en ocasiones, los socios del proyecto se alejaron de los objetivos iniciales para adaptar sus soluciones, no a nociones preconcebidas de un problema, sino a necesidades derivadas de situaciones reales sobre el terreno. 

Los casos de Catalunya y Lisboa

El Ayuntamiento de Lisboa, a través de su policía local, y la Generalitat de Catalunya, la cual es miembro de FEPSU, han participado en el proyecto CCI como socios. Ambos presentaron a finales de enero los conjuntos de herramientas que desarrollaron y los resultados de la fase de prueba. 

La ciudad de Lisboa creó una herramienta para crear conciencia sobre la importancia de la policía comunitaria entre los oficiales superiores de policía y los responsables de la toma de decisiones. El gobierno de Catalunya, en cambio, desarrolló material de orientación para los agentes de seguridad local para ayudarles a comprender mejor y mitigar la percepción de inseguridad entre los residentes locales.

A partir de las experiencias de sus miembros, Efus creará guías prácticas en las que se resalten los problemas que enfrentan y las soluciones encontradas por los socios de CCI durante esta fase de desarrollo para compartirlas con el resto de miembros de la red, la mayoría de los cuales enfrentan problemas similares en términos de percepción de inseguridad en el ámbito local, relacionados con delitos leves

Además, Efus ha capitalizado el trabajo realizado por los socios de CCI en esta fase de desarrollo, así como los métodos que utilizaron, para enriquecer y actualizar las herramientas metodológicas que forman parte de su enfoque estratégico de larga duración en seguridad urbana. Sobre este enfoque, se puede consultar la guía de Efus sobre auditorías de seguridad, cuyo objetivo es ayudar a entender mejor los nuevos desafíos que se presentan para la prevención y la seguridad urbana. 

Para conocer más sobre Cutting Crime Impact, puedes visitar la página web de FEPSU, donde además encontrarás información sobre muchos otros proyectos europeos en los que participan los miembros de la red. Si quieres acceder directamente a los conjuntos de herramientas elaborados por el proyecto, puedes ponerte en contacto con ellos a través de su página web

Una Asamblea General de Efus abierta al público

Del 15 al 19 de marzo, el European Forum of Urban Security (Efus) celebrará su asamblea general anual. Este es un momento clave para la asociación, ya que permite determinar colectivamente los objetivos anuales de la red, de la que FEPSU forma parte en representación de los municipios y regiones de España. Por primera vez en la historia, Efus ha decidido este año abrir parte de este encuentro al público a través de las sesiones online, con el objetivo de fomentar el intercambio de ideas y prácticas en el ámbito de la seguridad. En FEPSU te compartimos la programación de esta nueva edición de la Asamblea General de Efus, que será la más participativa hecha hasta ahora. 

Una oportunidad para las ciudades

El encuentro anual de la red europea iniciará el lunes 15 de marzo, con un primer evento solo para miembros de Efus, donde se realizarán las elecciones del órgano directivo de la asociación y se aprobarán los estatutos. El martes 16 de marzo, en cambio, se realizará una actividad organizada en colaboración con el Foro Alemán para la Seguridad Urbana (DEFUS), que abordará la nueva Carta de Leipzig como una oportunidad para que las ciudades y regiones incluyan la seguridad urbana en las estrategias de desarrollo sostenible

La primera Carta de Leipzig fue adoptada por el Consejo de la UE en 2007 y ayudó a establecer el concepto de desarrollo urbano integrado a nivel europeo. En noviembre de 2020, los ministros europeos responsables de desarrollo urbano y territorial actualizaron la Carta para vincularla al nuevo marco urbano definido por la Agenda Urbana Europea, así como para tener en cuenta los nuevos desafíos a los que se enfrentan las ciudades.

El miércoles 17 de marzo, por otro lado, se realizarán distintas sesiones de trabajo paralelas para la preparación de la conferencia internacional Seguridad, Democracia y Ciudades; una actividad que estará dirigida exclusivamente a miembros de Efus. 

Proteger el Estado de derecho

La situación del Estado de derecho en la UE será el tema central de la conferencia web que se organiza el jueves 18 de marzo en el marco de la Asamblea General de Efus. El papel que pueden desempeñar los entes locales y regionales, independientemente de su afiliación política, para mejorar y proteger los derechos fundamentales y el cumplimiento de la ley es de crucial importancia y pertinencia. Esta pertinencia se debe a que el nivel local y regional es el nivel de gobernanza más cercano a la ciudadanía. Por lo tanto, es a nivel local y regional donde los funcionarios electos pueden detectar los efectos dañinos concretos del incumplimiento de los derechos fundamentales y el Estado de derecho.

Para apoyar a los entes locales y regionales en sus acciones y mejorar una solución multinivel y de múltiples partes interesadas, las instituciones europeas también tienen un papel clave que desempeñar trabajando mano a mano con el nivel local y regional. Por ejemplo, a la luz de la condicionalidad del Estado de derecho, las instituciones europeas podrían trabajar coordinadamente para garantizar que las autoridades locales y regionales no sean sancionadas y privadas de financiación si los gobiernos nacionales cometen infracciones al Estado de derecho.

Sobre estos aspectos debatirán en este evento en línea el presidente de Efus y alcalde de Lieja (Bélgica), Willy Demeyer; el Comisario europeo de Justicia, Didier Reynders; el Jefe de la Representación de Budapest (Hungría) en Bruselas, Benedek Javor; y el Teniente de alcalde responsable de la cartera de seguridad de Gdansk (Polonia), Piotr Borawski. La conversación estará moderada por la directora ejecutiva de Efus, Elizabeth Johnston. 

Agenda urbana y lucha antiterrorista

El próximo período de financiación de la Unión Europea proporciona a las autoridades de las ciudades y regiones una serie de nuevas iniciativas europeas que buscan mejorar la seguridad urbana, con un énfasis específico en la protección de los espacios públicos. En este sentido, las actividades de la Asamblea General de Efus se cerrarán con una mesa redonda en línea sobre el papel clave de los entes locales y regionales en la política de seguridad de la UE e iniciativas relacionadas, la cual tendrá lugar el viernes 19 de marzo. 

Entre estas nuevas oportunidades concretas proporcionadas por la UE, este panel de discusión virtual se centrará en la iniciativa de la UE Pledge on Urban Security and Resilience, mencionada en la Agenda Contra el Terrorismo de la Comisión Europea, y en la nueva Iniciativa Urbana Europea. La nueva agenda antiterrorista de la Comisión Europea describe las ciudades como la “columna vertebral de la seguridad” y afirma que “los entes locales y regionales juegan un papel clave tanto en la protección de los espacios públicos como en la prevención de la radicalización”.

Para debatir estas iniciativas que pueden potenciar el papel de los entes locales y regionales en lo que respecta a la protección de los espacios públicos de forma integrada, Efus ha invitado a participar en la mesa redonda a los representantes de las instituciones europeas pertinentes, como la Comisión Europea o el Comité Europeo de las Regiones. Dentro de las presentaciones de ambas instituciones se pondrá el acento en el papel de las ciudades y regiones europeas en estas iniciativas. También participarán los representantes de redes de entes locales y regionales, como Efus y FEPSU, e iniciativas como el Partnership on Security in Public Spaces of the Urban Agenda de la UE.

Para inscribirte y poder participar de estas actividades en línea que forman parte de la Asamblea General de Efus, puedes visitar la página web de la red, donde además encontrarás más información sobre la programación del encuentro anual de la asociación. Si deseas informarte sobre los distintos proyectos relacionados con la seguridad urbana y la prevención que se desarrollan en España, no dudes en visitar la página web de FEPSU.

La tecnología de sensores portátiles y su potencial para la seguridad

En los últimos años se ha popularizado el uso de dispositivos de tecnología de sensores portátiles, los cuales permiten a las personas y organizaciones rastrear y monitorear las métricas de salud personal en tiempo real. Estos dispositivos aún no están lo suficientemente desarrollados para su uso en las fuerzas y cuerpos de seguridad, pero son una tecnología que avanza rápidamente y ofrece el potencial de equipar a los efectivos y agencias policiales con datos para mejorar la seguridad, la salud y el bienestar de los y las agentes. La RAND Corporation ha publicado un informe sobre los usos potenciales de estos dispositivos portátiles en el ámbito de la seguridad, el cual es el resultado de un grupo de trabajo realizado junto al National Institute of Justice de los Estados Unidos y el Police Executive Research Forum. En FEPSU te compartimos algunas de sus conclusiones. 

Retos y oportunidades

El grupo de trabajo que dio origen a este informe se desarrolló en base a talleres en los que participaron profesionales del ámbito de la seguridad, investigadores y desarrolladores tecnológicos para discutir el estado actual de los dispositivos de tecnología de sensores portátiles, conocidos como WST por sus siglas en inglés (Wearable Sensor Technology). 

Los participantes de los talleres, además, debatieron alrededor de cómo podrían ser aplicadas por las organizaciones encargadas de hacer cumplir la ley este tipo de dispositivos, como las pulseras, las bandas de pecho y tejidos inteligentes, con los que pueden obtenerse biomarcadores relacionados con la salud de los policías, para informar en la toma de decisiones operativas. 

Además, en el proceso de la investigación se discutieron también los posibles problemas con la aceptación de las WST entre los agentes, las nuevas políticas que serán necesarias para la introducción de estas tecnologías en los entornos de aplicación de la ley, y qué datos se recopilan, cómo se recopilan estos datos y cómo se interpretan y utilizan. 

Para elaborar sus conclusiones, el grupo de trabajo partió de cuatro preguntas de investigación: ¿Cuál es el estado actual y en un futuro próximo de la tecnología de sensores portátiles?, ¿qué puntos de intersección existen entre estas tecnologías y los intereses de los cuerpos policiales, tanto para los agentes como para las agencias?, ¿cuáles son los retos específicos que estas tecnologías representan para la privacidad de los datos, sus titulares y la ciudadanía? y ¿cuáles son las cuestiones destacadas asociadas con las tecnologías de sensores ponibles y cómo se dirigen de manera específica?

Incipiente, pero prometedora

La primera conclusión a la que llegó el informe de RAND Corporation es que las tecnologías de sensores portátiles disponibles hoy en día en el mercado no están lo suficientemente desarrollados para fines de aplicación de la ley en general. Los dispositivos comerciales, aunque económicos y portátiles, carecen de la exactitud y precisión necesarias para informar y apoyar la toma de decisiones en el ámbito de la seguridad. Los WST utilizados en entornos médicos, aunque tienen una excelente exactitud y precisión con datos de alta calidad, tienen un costo prohibitivo para una amplia distribución y no son portátiles.

Por estos motivos, el enfoque a corto plazo debe ser el de prepararse para un momento en que la tecnología sea más aplicable a las funciones que desempeñan las fuerzas y cuerpos de seguridad. La clave es obtener la aceptación de los agentes policiales ahora, no para la tecnología actual, sino para los dispositivos desarrollados en el futuro y para los posibles efectos posteriores en el campo a medida que se implementan las WST para apoyar la seguridad y el bienestar de los agentes, la retención de la fuerza laboral, la responsabilidad y otros asuntos.

Actualmente, el panorama que define la intersección entre estas tecnologías y la aplicación de la ley es el de la incertidumbre. La aplicabilidad de las WST al ejercicio de las labores policiales será proporcional a qué tan bien la tecnología puede informar de manera confiable las decisiones sobre las actividades diarias de los agentes. Los dispositivos deben integrarse a la perfección con la tecnología que ya es utilizada por las agencias policiales, las medidas deben ser válidas y confiables, la interpretación de los datos debe ser clara y las políticas deben estar vigentes para administrar y monitorear los datos

En este sentido, las fuerzas del orden deben ser un actor clave en el proceso de desarrollo de las WST. Es posible que las especificaciones necesarias para el uso de estos dispositivos en el ámbito de la seguridad no coincidan con el estándar de la industria comercial, por lo que las agencias policiales deben entablar un diálogo con los fabricantes de las WST para caminar hacia una tecnología más aplicable a este ámbito. 

Recomendaciones para un buen uso 

Finalmente, en el informe se señalan una serie de recomendaciones para favorecer el buen uso de esta tecnología de sensores portátiles por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad. Por un lado, los agentes deben recibir formación sobre los múltiples usos y propósitos de WST y se deben realizar pruebas piloto y recopilar comentarios sobre las experiencias de los y las policías en su uso en las actividades diarias. Los resultados de estas pruebas deberán identificarse en las etapas tempranas del proceso de implementación, para poder corregir los posibles errores o incomodidades. 

Además, se deberán desarrollar e implementar políticas y procesos sobre cuándo y por qué se pueden compartir los datos, los cuales, además, se deberán cifrar en cada capa y con un cifrado de extremo a extremo para garantizar su protección. Esto estará ligado al desarrollo también de un enfoque secuenciado o por fases para llevar la tecnología validada al campo para evaluaciones escalonadas, así como al monitoreo del estado de la investigación, para administrar las expectativas del público y de las agencias de aplicación de la ley.

Finalmente, deberán establecerse también líneas de base individuales para tener en cuenta las diferencias entre individuos, definir un conjunto de mejores prácticas para los dispositivos portátiles de los consumidores y desarrollar orientación y educación sobre cómo interpretar datos y métricas para los usuarios de WST


Si quieres leer el informe completo, puedes acceder a él a través de la página web de RAND Corporation. Si quieres encontrar más información referente al uso de la tecnología en el ámbito de la seguridad y la prevención, puedes visitar el blog de FEPSU, donde además encontrarás distintos proyectos que promueven el uso de estas tecnologías entre las fuerzas y cuerpos de seguridad, en el ámbito local y regional.

Espacios públicos seguros y protegidos

El nuevo proyecto Secu4All se ha puesto ya en marcha. La iniciativa liderada por Efus se lanzó oficialmente en diciembre del 2020, pero dio su pistoletazo de salida el pasado 26 de enero con un encuentro virtual entre los socios del proyecto. En esta reunión de lanzamiento se discutió el alcance del proyecto, que busca fortalecer el las capacidades de las autoridades locales y regionales para garantizar la seguridad de los espacios públicos y la protección de aquellos lugares vulnerables ante posibles riesgos, como instalaciones deportivas, centros comerciales, escuelas y sistema de transporte. En FEPSU te compartimos algunas de las conclusiones de este primer encuentro. 

Herramientas para las ciudades

Los socios del proyecto Secu4All debatieron alrededor de la amplia gama de amenazas y riesgos que afectan los espacios públicos urbanos, como el terrorismo, los delitos menores y el incivismo, los disturbios y otros fenómenos más recientes, como la pandemia de la Covid-19. Estos plantean desafíos en constante evolución para las autoridades locales y regionales, que deben encontrar el equilibrio adecuado entre garantizar la seguridad de los espacios públicos y preservar su apertura y accesibilidad universal inherentes. 

Para superar estos retos, el proyecto Secu4All promueve el fortalecimiento de los conocimientos y capacidades de los actores locales y regionales. En este sentido, el programa proporciona formación a los responsables de políticas públicas en cuatro áreas: métodos y herramientas para evaluar la vulnerabilidad de los espacios públicos locales; mejorar la comunicación con las partes interesadas relevantes en caso de crisis (antes, durante y después); poner a disposición tecnologías innovadoras para reforzar la protección de los espacios públicos y el intercambio de conocimientos sobre el uso ético de dichas tecnologías y los datos recopilados; y, finalmente, reducir la sensación de inseguridad de los ciudadanos mediante el diseño urbanístico y la gestión de los espacios públicos.

Un programa de formación integral

El proyecto consiste esencialmente en un programa de formación integral dirigido a las autoridades locales, regionales y agentes de seguridad local. Estructurado en cuatro módulos, comprende sesiones de aprendizaje virtuales e interactivas, ejercicios prácticos y estudios de casos. Además, estas sesiones se complementarán con visitas de campo a diferentes ciudades europeas con experiencia significativa en la protección de espacios públicos y objetivos suaves (es decir, lugares vulnerables como escuelas, complejos deportivos, centros comerciales, lugares de culto, etc.). 

Este programa de formación no es exclusivo para socios de Secu4All: se establecerá una plataforma de aprendizaje electrónico al final del proyecto con todo el contenido de formación en inglés, francés, alemán e italiano para que esté disponible para todos los miembros de Efus y otras personas interesadas. 

Durante la reunión de lanzamiento del proyecto, los participantes pudieron dar su opinión sobre el contenido de la capacitación y sobre los principales riesgos y desafíos que enfrentan en la gestión de sus espacios públicos locales, así como las medidas de protección existentes. Por ejemplo, La Haya tiene un modelo de tres fases para evaluar el nivel de riesgo en un espacio público y determinar la respuesta adecuada en consecuencia. Otro ejemplo es Xàbia, que se centra en el uso de la tecnología para controlar el acceso a zonas muy frecuentadas como los distritos de ocio nocturno, así como en la formación de la policía local para responder a situaciones críticas como un atentado terrorista y los esfuerzos para mejorar la planificación y el diseño de las áreas de recreación del municipio para hacerlas más seguras y accesibles.

Alianzas locales necesarias

Por importante que sea, la adquisición de conocimientos y capacidades no es suficiente para proteger adecuadamente los espacios públicos urbanos mientras se preserva su apertura. Efus y el consorcio de Secu4All también discutieron un aspecto clave, que es que esto requiere asociaciones locales amplias y bien comunicadas. 

De hecho, es responsabilidad de las autoridades locales y regionales promover y coordinar un enfoque de múltiples partes interesadas que involucre a todos los actores relevantes (policía, residentes y usuarios, servicios de emergencia, empresas locales, etc.). Cómo hacer esto de manera eficiente y con quién es también un aspecto central del proyecto Secu4All.

Desde FEPSU queremos apoyar también a la formación de estas alianzas de ciudades y a las redes de interconexión de profesionales de la seguridad y la prevención, para favorecer el intercambio de experiencias de éxito. Por eso, en nuestra página web podrás encontrar diversos proyectos en los que participan nuestros socios, donde se promueve también la colaboración entre autoridades locales y regionales, así como el debate y análisis alrededor de distintos temas vinculados con aquellas iniciativas que han ayudado a mejorar la seguridad urbana en distintas partes de España y Europa.